Dolor, algo común.

Anda, mira, ha vuelto mi sentimiento más normal y habitual.


¿Por qué siento yo que tengo la culpa, aunque soy consciente de que no es así? En serio, no es justo. El adiós será normal, esperado quizás. Derrochamos mil formas de amar. Y, ¿Qué diremos al vernos? Ya no será igual. Seremos, como dos extraños sin más, como dos gotas sin su lluvia, como la arena sin el mar…
No ha sido tiempo perdido sino mal invertido.

No entiendo nada, solo quiero desaparecer. ¿Me hago imponer? Pero si está claro que lo que más quiero en el mundo es a él, y lo sabe. ¿Por qué me hace esto? Intentaré seguir adelante; Y sé, que podré.

2 comentarios:

MartaOrtiz dijo...

Me encanta tu blog, aunque sea triste es muy personal y te entiendo perfectamente yo he pasado por lo mismo.
No cambies nunca tu estilo.
Un besazo.

Ángel Lázaro dijo...

Faltan adjetivos abajo para este tipo de blogs, nena. Poco y preciso, muy bueno. Gracias por seguirme, yo haré lo propio, nº 32. Un besazo.